La crisis está agudizando severamente las diferencias entre ricos y pobres

El 22 de febrero, en la sede de Cáritas Española en Madrid, se presentó el informe FOESA. “Exclusión y Desarrollo Social en España 2012. FOESA es una fundación creada por Cáritas para hacer estudios de la realidad social de España. FUNDACION FOESA

En estos momentos el deterioro es mucho mayor y las perspectiva son muy pesimistas. ¿Hasta cuando?

Voy a esquematizar alguna de las conclusiones más sobresaliente que este informe ha puesto de manifiesto:

• Cerca del 22% de los hogares españoles se encuentran por debajo del umbral de la pobreza.
• La principal causa es el desplome del empleo: los más de cinco millones de parados suponen un 23% de la población activa. Lo que supone la tasa más alta de toda la Unión Europea (UE), donde la media se sitúa en el 9,7%.
• Los parados de larga duración (al menos un año sin trabajo) suponen aquí uno de cada dos, cuando en 2007 el porcentaje estaba en el 22,7%.
• Desde que se inició la crisis, se ha triplicado el número de hogares con todos sus miembros sin trabajo llegando al 9% del total. No reciben ningún tipo de ingreso un 3,3%.
• La crisis agudiza profundamente las diferencias sociales. En España, la tasa de desigualdad (que el informe extrae comparando el nivel económico del 20% más rico con el 20% más pobre), ha pasado de un valor de 5,3 en 2007 a un 6,9 a finales de 2010. Duplica la de Francia, triplica la de Alemania y quintuplica la registrada en el conjunto.
• Esta desigualdad existe entre autonomías. La distancia porcentual entre la comunidad  más pobre, Extremadura, (38,2%) y la más rica, Navarra, (7,3%) es de más de 30 puntos. Las diferencias son semejantes entre otras Comunidades como País Vasco (11,6%) o Asturias (12,3%) y otras como Canarias (31,1%), Andalucía (30,1%) o Murcia (29,2%).
• El 41% de los hogares españoles son incapaces de cubrir las condiciones de bienestar básicas, o  el número de  ejecuciones hipotecarias; cuatro veces más que los que se dieron solo tres años antes.
• Finalmente, baste decir que la renta media de la población española ha pasado de los 19.300 euros de 2007 a los 18.500 de 2010. Esto unido la evolución de los precios, supone una caída real de la renta del  9% de media por persona.