Espero que mucha gente votante del PSOE sea capaz de
analizar lo que está sucediendo el partido. Milité en este partido durante años. Creo que me afilié
en 1979, no recuerdo la fecha exacta.
Éramos un puñado de afiliados hasta que se ganaron las elecciones el 28 de
octubre de 1982. Luego fuimos más.
Durante doce años se fidelizó el voto de mucha gente. La
inmensa mayoría de los militantes y todos los votantes de a pie gente
trabajadora, la mejor gente de España, con ilusión por el cambio y la mejora de
la sociedad española. No puedo decir lo mismo de los dirigentes.
Yo me di cuenta de que las intenciones y los intereses de
los que dirigían el partido no eran la
transformación de España ni su desarrollo, ellos eran fieles a sus propios
intereses, no a los intereses y el bienestar de los españoles, si eran fieles al
partido era porque eso les reportaba beneficios. Todo el mundo que pretendía ser algo
en el partido, tenía una sola cosa que hacer estar atento a lo que querían los “jefes”
y seguir sus consignas, así se podía
crearse una posición en el aparato y seguir
la bola, a los que se les ocurría ir por libre no tenían futuro. Lo importante era ser fiel a las
directrices y a los líderes del partido.
La máxima “quien se mueva no sale en la foto” describe perfectamente en lo que ha
sido la democracia interna en el partido socialista.
Esto lo descubrí en
octubre de 1985 tuvimos una reunión de
la agrupación de Burgos, donde militaba, aunque ya lo venía intuyendo hacía algunos meses: lo que
se pedía los militantes no era que trabajáramos por el bien de España, o
nuestras autonomías o nuestras ciudades, ni siquiera al PSOE, no, lo que teníamos que hacer es ser fieles a
Felipe González, el líder y después seguir fieles a la cadena de mando. Nos
salimos de aquella reunión dos personas.
He necesitado varios años y que surgiera el 15 M para
me diera cuenta de la otra condición
esencial de la naturaleza del partido: era uno de los instrumentos de “los que mandan” para controlar y orientar
a las gentes, aparentando progresismo e
interés hacia lo social, dando una de cal y otra de arena pero en definitiva en
lo esencial, la política económica siendo como una gota de agua con su
contrincante el PP.
En movimiento vecinal repetíamos con pena y enfado que el
partido socialista había sido el agente principal de la desmovilización ciudadana.
Se las había arreglado para no hacer necesario el tejido social pues para eso
estaban ellos que mandaban en las instituciones cercanas al ciudadano. Todo
para el pueblo, pero sin el pueblo.
El 15M empoderó al pueblo de nuevo, después se les ocurrió a
unos cuentos organizar un partido que dijo a la gente que PODEMOS y se les armó la marimorena a los
socialistas. Quedaron descolocados. Unos jefes quería integrar en el partido la
dinámica de empoderamiento de, por lo menos, los militante y otros jefes pedían
a voces que les devolvieran el partido como estaba en los tiempos del poderoso
Felipe. Este se sintió salvador de nuevo y dio la
orden de retomar el rumbo correcto, pero
el capitán de la nave no le hizo caso y pretendía unirse con los de PODEMOS
y eso ponía en peligro el seguir
siendo un instrumento útil para “los que mandan”. Hubo un motín y destituyeron al
capitán. Eso hubiera sido todo pero no se pudo controlar a “la comunicación”
aunque controlara a la mayoría de los
medios y quedó patente que el PP. el PSOE estaban bajo el mismo paraguas. Con su "ayudante" por el bien de España cerca.
Sacad vosotros las conclusiones……
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