miércoles, 25 de marzo de 2015

CÁRITAS: ALGUNAS IDEAS


LO QUE CÁRITAS ES:

Es una organización de la Iglesia católica que ayuda a las personas pobres. Como  todas las organizaciones eclesiales está organizada de forma  piramidal.  Yo voy a analizar, desde mi personal perspectiva y sin ninguna pretensión, solo manifestar mi experiencia de varios años de colaboración sincera y, creo, generosa, como veo la realidad de cáritas base, o sea cáritas parroquial y diocesana.

Es una organización de beneficencia en el sentido más clásico. Se suministra comida y ropa, se atiende a multitud de emergencias, se escucha; aquí termina prácticamente la labor de cáritas base . El magnífico trabajo que Cáritas nacional e internacional hacen, analizando la realidad de la pobreza y los pobres y su denuncia de la injusticia en la que nos encontramos, la mayoria de los voluntarios no lo conocen. Hasta hace poco, de hecho, estos temas no se trataban y resultaban incómodos para la mayoría de los voluntarios, los curas y los obispos, (hasta que llegó el papa Francisco), y los pocos que nos atrevíamos  a hacer algún comentario éramos silenciados por  las miradas de extrañeza de los voluntarios y la prohibición o el rechazo, más o menos disimulado, de los curas. 

En la organización básica a pie de calle, que es en la que yo he colaborado, en  cáritas  actúan tres grupos de personas. Los presento de abajo arriba para ser fiel a mi experiencia de que cáritas es una organización piramidal: A) Los voluntarios que son la inmensa mayoría, B) Los profesionales contratados y C)los curas, a nivel parroquial y el obispo a nivel diocesano.

A)     Los Voluntarios:







En ella ejercitan su bondad un enorme número de cristianos prestando ayuda a las personas desprotegidas y pobres de la sociedad. La mayoría son mujeres.
En un ochenta y tantos por ciento  su actividad es puramente asistencial. El otro veinte son actividades de acogida y acompañamiento.


Se caracterizan por ser gente “de buen voluntad”. Esto es “los de cáritas son buena gente, amables, acogedores, fieles, crédulos y bien intencionados. “Los de cáritas se toman en serio su actividad pero, en general, se guían por su intuición, su buena fe y cada uno es  generosa o generoso en la medida de su sentir”. Les hay más generosos y les hay que  reparten lo recibido con alguna reticencia. Les hay que acogen con amabilidad y cercanía y les hay que tratan a los pobres con cierto despotismo.

Son gente fiel a la iglesia. Yo diría que “de los más fieles cristianos”. Tienen interiorizado que a ello o ellas les toca colaborar, oír y callar, no se les ocurre tener iniciativa y si algo se les ocurre algo o ve la necesidad de algo, jamás se atreverán a realizarlo sin el permiso del párroco. “A los de cáritas les sobra buena fe y entrega”. “Son gente de fiar”. “Son fieles a la iglesia y bien mandados”. Un noventa y muchos por cien son  muy conservadores, tanto en su vivencia religiosa como en general en su vida. En un noventa por ciento son mayores, viejos. Un buen número lleva media vida en cáritas.

No están organizados, sí están agrupados de forma más o menos desordenada u ordenada. Depende de lo que quiera o le guste al párroco. Se suele encargar de las tareas el más dispuesto o dispuesta o el más mandón o mandona. No hay responsables de tareas, solo  hay encargados. Me explico: un responsable de tareas es aquel que organiza la tarea y a los otros voluntario en el ámbito de su tarea, si es necesario toma las decisiones correspondiente a esa tarea, naturalmente en diálogo con los voluntarios implicados.

tienen alguna autonomía, por supuesto, pero solo en cosas menores, por ejemplo si a una familia se la da un kilo o tres kilos, que productos se compra, etc. No siguen en estas cuestiones unas normas o estándares comunes, cada uno entrega las cantidades que le parece y según un criterio propio.

B)     Los Curas:

Es obvio que no son voluntariosEn su mayoría se sienten en la  obligación de que “las Cáritas”  estén presentes en su parroquia. Creo que últimamente  han recibido la consigna de que en cada parroquia funcione cáritas. Hace algún tiempo era una cosa opcional según el parecer del párroco.

Llevan la dirección y la orientación a nivel parroquia y diócesis. Esto se supone y ni siquiera se  lo plantean incorporar voluntarios laicos a esta tarea, sencillamente, es una más de sus responsabilidades.

Al ser cáritas  una  de las obligaciones que les han encomendado, he encontrado tres tipos de curas.

  • Los que lo asumen como una obligación pesada y les cuesta un montón casi todo lo relacionado con ello, especialmente el trato con la gente.
  • Los que lo asumen con buena voluntad pero no lo consideran una de sus prioridades y, por supuesto no entienden que la acción de cáritas sea uno de los pilares básicos de la acción parroquial. Son gente profesional y por lo tanto acogen a la gente con respeto y cariño, pero no se integran en el equipo de cáritas, aunque hagan multitud de cosas relacionadas con las tareas de cáritas.

  •  Los que consideran cáritas como la actividad nuclear de la parroquia por ser la manifestación de la opción por los pobres de la comunidad parroquial. Se integran en el grupo de cáritas y asumen las tareas, en la medida que pueden, como uno más. Para hablar con lenguaje apropiado: los curas que tienen el carisma de la caridad, del servicio es un don del espiriu y  todo el mundo sabe que no se identifican ministerio y carisma y que no se pueden dirigir los dones del espíritu por nombramiento eclesiástico. En las parroquias que son regidas por estos curas, a pesar de las carencias estructurales de de la iglesia, cáritas se parece más a lo que debía de ser la organización.  El cura del 'Gallinero

   C) Los profesionales:
Se toman cáritas como su trabajo. Cada uno responde según los personales niveles de profesionalidad y su vivencia religiosa.
Porque cáritas sea una organización eclesial y ellos trabajen aquí no se  puede dar por  supuesto que ellos se sientan vinculado a la actividad pastoral de la iglesia. También he encontrado en ellos tres posturas diferentes con  relación a  esta faceta característica de cáritas por ser una organización eclesial.

  •  Los que no se sienten vinculados a lo eclesial, con cáritas solo tienen una relación laboral como profesión social.
  •  Los que tienen cuidado de no olvidar que cáritas es una organización eclesial e introducen ciertas prácticas que se suponen hay que hacer en una organización como esta, por ejemplo,  rezar al comienzo de las reuniones, leer algún texto bíblico y cosas así. Por supuesto su relación con la iglesia en su vida privada es variada.
  •  Los que se sienten vitalmente vinculados a la iglesia y además son empleados de cáritas. Entenderán lo que realmente es cáritas y se homologaran a los voluntarios, aunque cobren un sueldo y tengan unas obligaciones laborales.

La cáritas de base, que yo he vivido y la que intentado describir con franquezas,  reproduce fielmente la situación de las comunidades cristianas, diócesis y parroquias que tenemos

LO QUÉ CARITAS DEBERÍA SER.


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Está claro que cáritas, además de una ONG, insertada  muy profundamente y con un enorme acierto,en la sociedad civil, Tienen que ser sentida como uno de los pilares de la misión y la tarea de la iglesia.

Entiendo que cáritas debería ser:

El centro de la pastoral eclesial. La manifestación más sobresaliente en las parroquias, aunque no única, de lo que la iglesia es: la iglesia de los pobres. Parece que el papa Francisco ha insistido en ello con fuerza. Una especie de signo de que nuestras comunidades son la iglesia de los pobres.

Dado que ministerio y carisma no se identifican, cáritas no debería estar dirigida por los clérigos. Ellos tienen multitud de funciones pero muchos de ellos no se sienten atraídos por el carisma de la caridad, cuando lo tienen que ejercer lo experimentan como una carga. En las parroquias hay cristianos que se sienten vocacionados  a la caridad y el servicio y esos cristianos deben ser los que gestionen cáritas. La función de los párrocos en cáritas es, como en el resto de las actividades  parroquiales, la de orientar, animar, formar, etc.  etc.  al resto de los cristianos. Mucho menos deberían  dirigir cártas  los trabajadores sociales que tienen un trabajo específicamente técnico pero no se tienen por que sentir militantes cristianos.

Es necesario que cáritas esté organizada de arriba abajo, que los voluntarios de cada parroquia se constituyan en grupo base. Este grupo base elegiría dos o tres gestores que colegialmente serían los gestores de cáritas parroquial. El funcionamiento de cáritas  dentro de la parroquia tiene que ser autónomo. Precisamente por serlo tiene que estar fuertemente coordinado con los otros grupos parroquiales y de manera especial con los curas. Y naturalmente si alguno de los curas se siente vocacionado hacia la caridad debería integrarse, como un voluntario más, en el euipo de cáritas  con lo que la coordinación sería perfecta.

 La estructura de las diócesis  está organizada en arciprestazgos. El  consejo de cáritas en el arciprestazgo se constituiría por un representante de cada parroquia, y este consejo elegiría  un grupo de tres o cuatro que gestionaran   cáritas arciprestal de forma colegial.

Cáritas diocesana seguiría la misma dinámica para constituir el consejo diocesano y  elegiría una dirección diocesana colegial de tres miembros.

Es necesario incorporar a cáritas  representantes de las personas beneficiarias de los diversos servicios que esta presta. Es algo problemático pero imprescindible para solucionar los muchos problemas de objetividad y justicia que tienen los voluntarios, pues ellos no pueden tener el conocimiento cercano de las realidades que viven los beneficiarios. Es de todo punto imposible conocer las situaciones reales de las personas si no estás inmerso con  ellos, por mucha empatía que se tenga. Posiblemente la solución sería que algunos de los voluntarios de cárítas dinamizaran grupos perceptores. Grupos de formación, de tareas, etc. Actualmente es una anomalía, por lo menos curiosa, que los perceptores de cáritas estén completamente desaparecidos de la realidad parroquial aunque se digan católicos.

Es urgente que cáritas además de su a actividades de beneficencia tenga actividades que conduzcan a la transformación de la sociedad  que genera tantos pobres y personas en riesgo de serlo. Esto requeriría un estudio profundo y trabajar en colaboración estrecha con otras instituciones y la administración. Un primer paso estaría en integrarse en las asociaciones vecinales y demás asociaciones presentes en los barrios. Sobre todo debería estar  en una permanente denuncia de la situación de pobreza, injusticia y desigualdad que sufren las personas que acuden a cáritas. 

Tenemos unas comunidades envejecida y los voluntarios de caritas son el reflejo de esta realidad. Rejuvenecer los grupos de cáritas es una condición imprescindible para  revitalizarla. Creo que es evidente que si  nuestras comunidades cristianas fueran comunidades activas, igualitarias  y corresponsables, los jóvenes dejarían de sentirse objetos (ovejas dle rebaño)   y se sentirían sujetos de su sentir religioso. Dejarían de ser “fieles” para ser hermanos corresponsables, dejarían de sentirse manipulados para ser coautares de su vivencia religiosa.

Conclusión:
Como no soy un iluso comprendo que me he situado en el ámbito de la utopía y  sé que esto suena a chino para la inmensa mayoría de los voluntarios, peligroso y un despropósito para casi todos los curas y obispos, en el mejor de los casos una ensoñación. (recomiendo ver:micro Utopias 

Es realmente curioso donde hemos llegado desde donde partimos, porque si mal no recuerdo, la utopía de Jesús era una comunidad fraternal, donde todos sean hermanos y hermanas, sin divisiones ni títulos (cf. Mt, 23, 8 y ss.). 

Admiro al papa Francisco por sus esfuerzos pora volver  a la iglesia a su originaria utopía. Pero lo tiene realmente crudo.

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